Desde las 4 de la mañana de ayer los empleados se concentraron en las puertas de la fábrica de envases de aluminio en la Avenida Ing. Guillermo Marconi 1035, ciudad de El Palomar para reclamar por sus derechos laborales. Allí los esperaban los efectivos de la Policía Bonaerense rodeando la locación con seis agentes de infantería por esquina y, diez en la puerta impidiendo el acceso de los trabajadores.
La situación que está atravesando la empresa viene hace más de un año. Según informó uno de los empleados despedidos, la producción no disminuyó sino que todo lo contrario por lo cual, no hay justificación para implementar medidas de ajustes. Sin embargo, desde la llegada del nuevo gerente en el los últimos dos meses la situación se tornó tensa ya que quieren agregarle tareas a los trabajadores. “Ellos están buscando que un mismo personal haga tareas de diferentes áreas por un mismo sueldo y nosotros claramente nos negamos. Si aceptamos les damos pie al achicamiento de la planta”, comentó Pedro, quien trabajaba en el sector de mantenimiento eléctrico hasta el martes pasado cuando se enteró de su despido.
“Nos decían que si no cumplíamos con las propuestas de la empresa nos iban a echar, como nos negamos porque la reforma laboral no está todavía, lo hicieron. Ahora, nos intimidaron con que si no retomamos la producción van a continuar echando gente. Los despedidos estamos acá afuera y los que están adentro tienen la fábrica tomada hasta que reincorporen a todos los compañeros que nos dejaron sin empleo” dijo Pedro.
Tras cuatro reuniones con los responsables de personal en los que no se llegó a ningún acuerdo, las medidas de fuerza continúan y, por el momento la situación se mantiene igual: de parte de los operarios cese de actividades hasta recuperar los puestos de trabajo; de parte de la empresa amenazar con más despidos hasta que vuelvan a producir. Un círculo vicioso del que, hasta el momento no hay solución alguna.
Contando con el apoyo del secretario de la UOM, Antonio Caló, y de la Región Oeste de la CGT, los metalúrgicos decidieron pasar la noche en vela en las instalaciones y, durante el día de hoy tendrán una audiencia con el Ministerio de Trabajo para llegar a un acuerdo. Mientras tanto, los reclamos continúan a pesar de la lluvia.